Los cambios en el comportamiento sexual, durante el proceso de envejecimiento,
en el hombre son más numerosas que en la mujer pero se producen de forma más
gradual, a saber:
• Reducción de los niveles de testosterona a partir de los 50 años.
• Reducción del tamaño de los testículos, a la vez que se tornan más flácidos.
• Disminución de la cantidad de espermatozoides.
• Incremento de las anomalías cromosómicas en los espermatozoides
eyaculados.
• Aumento de tamaño de la glándula prostática, en un porcentaje elevado de
hombres, hecho que provoca alteraciones urinarias, a veces dolor en los testículos
y en la zona distal del pene;
• Disminución de la fuerza de las eyaculaciones,
• Pérdida de la viscosidad y el volumen del líquido seminal.
El adulto mayor aunque sin una dolencia determinada tiene algunas
limitaciones propias de la edad, ya que existen múltiples causas orgánicas que
van a desencadenar una pérdida de la actividad sexual. Entre estas causas se
destaca la presencia de enfermedades vasculares y una reducción de los niveles
de testosterona. Las enfermedades crónicas como la diabetes reducen o eliminan
la respuesta sexual en el hombre.
REFERENCIAS : Referencia: Maria A. Cornachione :Psicología de la vejez: aspectos biológicos, psicológicos y sociales, Argentina -2006
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